Batallas contra la violencia
Antes de mi deployment, lo que más conocía de El Salvador era su historia contemporánea marcada por la violencia. La mayoría de libros y documentales que había consultado para ir descubriendo mi futuro destino con Médicos del Mundo destacaban la violencia en la que estaba inmersa la sociedad salvadoreña, principalmente, a causa de las pandillas o maras y el crimen organizado.
Vislumbré un panorama de vulneración de derechos, abusos, agresiones y asesinatos sin olvidar los numerorísimos feminicidios y formas de violencia contras las mujeres.
Una vez en el terreno, he podido comprobar cómo estos niveles de violencia existen, especialmente en determinadas zonas muy localizadas. Asimismo, he visto como los salvadoreños y salvadoreñas conviven a diario con pequeñas y grandes formas de violencia, amanecen con escabrosas noticias sobre crímenes horrendos y sufre en sus carnes y en las de sus familiares el miedo o las amenazas.
Pero, sin dudad, desde aquí, desde San Salvador, lo que destaca son las luchas individuales y colectivas que los y las salvadoreñas emprenden a diario de forma silenciosa y pública en pro de una vida libre de violencia. Concretamente, quiero dejaros dos ejemplos de las múltiples experiencias que he vivido durante mi deployment en este sentido:
Adolescentes como agentes de cambio dentro de contextos de violencia generalizada
Afortunadamente, tuve la posibilidad de participar con American Friends Service Committee, una de las organizaciones con la que solemos colaborar en El Salvador, en los asuntos de migración y desplazamiento forzado, en una jornada de convivencia con adolescentes de colonias con altos índices de violencia por pandillas.
Pude conocer el trabajo que varias organizaciones de sociedad civil de El Salvador vienen realizando durante más de tres años con grupos de adolescentes, chicos y chicas de entre 10 y 19 años, empoderándoles y convirtiéndoles en actores de cambio de sus comunidades. Unas comunidades (colonias) con un control territorial muy marcado por pandillas y con altos índices de pobreza y violencia intrafamiliar.
Éstos jóvenes reciben una beca para cursar sus estudios en colegios de calidad. Al mismo tiempo, los fines de semana, estas organizaciones trabajan con ellos en dinámicas y actividades que sirven para formarles en derechos humanos, prevención de la violencia, gestión emocional y desarrollo de habilidades artísticas. En definitiva, son jóvenes empoderados y organizados que desde el interior de sus comunidades fomentan nuevas vías de desarrollo y crecimiento personal alejado de la violencia.
Violencia de género
Trabajando en la organización del evento de lanzamiento del proyecto “Construyendo relaciones de equidad de género en la sociedad, desde la Universidad de El Salvador” pude conocer a fondo otro gran intento positivo y colectivo de construir nuevas formas de relacionarse entre géneros alejadas de la violencia. Para la elaboración de los materiales de comunicación que se usarían en este proyecto me informé sobre sus objetivos y el contexto en el que se enmarcaba. Me asombré con las numerosas cifras de acoso dentro de la universidad y con los testimonios de las flagrantes desigualdades de género entre salvadoreñas y salvadoreños.
Así, pude comprender cuan pertinente resulta la ejecución de este proyecto que contribuirá a cerrar en alguna medida esta gran brecha de desigualdad y violencia hacia las mujeres.